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ALFONSO GARCÍA, en Diario de León

Empieza el año con alegría. Más aún en los tiempos que corren. Año Romántico, bautismo para el bicentenario de un escritor: Enrique Gil y Carrasco, ejemplo y paradigma del Romanticismo español, que nació el 15 de julio de 1815 en la villa de belleza única que se llama Villafranca del Bierzo. Villafranquino universal, la historia de los gozos lo ha hecho mundialmente conocido por su novela El Señor de Bembibre, obra que, sin embargo, limitó, entre otras, su proyección poética. Con el fin de subsanar en alguna medida esta deficiencia, presentamos el 23 de abril de 2001 en la capital del Burbia su Obra Poética, en edición de Emilio Peral Vega para el Instituto Leonés de Cultura, presentación a la que siguió una ofrenda floral. A esta anécdota podrían añadirse mil realidades, pues León, el Bierzo de forma determinante, está plagado de calles, plazas, placas, monumentos, centros educativos… que recuerdan el nombre de Gil y Carrasco, escritor fascinante, periodista sustancial, espíritu progresista. Referencia inevitable.

Todo esto está muy bien, cómo no. Hasta es de agradecer. Y mucho. Lo que me parece anunciar el Año Romántico –y aquí reside, a mi juicio, el gran mérito- es la voluntad de sistematizar la presencia del escritor berciano mediante el recuerdo y el compromiso activos. Ya es sintomático y esclarecedor que el ambicioso programa diseñado con motivo de este bicentenario (literatura, música, teatro, congresos, exposiciones…) responda a una acción conjunta (Consejo Comarcal del Bierzo, ayuntamientos de Ponferrada, Bembibre y Villafranca), ejemplar por lo insólito, a la que se añadirán seguramente otras instituciones.

Si toda la programación enriquecerá el panorama cultural berciano y leonés, en una apuesta necesaria sobre la que es conveniente incidir permanentemente, quiero llamar la atención sobre dos aspectos que tienen vocación de universalidad y permanencia. Por una parte, la aparición de la Obra Completa del escritor en diez volúmenes, magnífico proyecto liderado por el incansable periodista berciano Valentín Carrera, que cuenta con un amplio equipo de autores y profesionales. Su actualidad garantizará seguramente no pocas lecturas.

Se anuncia la presentación en Fitur de la Ruta Turística que recorre lugares de la vida y obra de Enrique Gil y Carrasco, fundamentalmente Ponferrada, Villafranca, Bembibre…, ese Bierzo mágico e histórico que también él ayudó a poner en valor con su obra. Con este eje vertebrador, aparecerán enhebradas las mil razones paralelas que invitan a conocer y gozar de esta tierra luminosa que es el Bierzo. Estoy seguro de que la advertencia de José Manuel Blecua («León tiene una deuda con Enrique Gil y Carrasco») quedará definitivamente saldada en su Año Romántico. Gracias y enhorabuena. Ya sabemos que tenemos una cita que sobrepasa los límites de la importancia. Un aliciente.

Diario de León